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La importancia de los Círculos de Mujeres
Nos
encontramos en un momento decisivo para el Despertar de la Energía
Femenina tanto en hombres como mujeres. Corren tiempos de escuchar más
nuestro cuerpo, darnos cuenta de que necesitamos aflojar el ritmo de
vida, y de relacionarnos de otro modo.
En este nuevo percibir, las
Mujeres en especial, sentimos el impulso de reunirnos para compartir,
para expresar y para reflexionar acerca de temas relacionados con
nuestra Esencia Femenina.
¿Qué es un Círculo de Mujeres?
Un
Círculo de Mujeres es un encuentro entre dos o más mujeres con una
intención determinada, más allá de charlar acerca de lo cotidiano o una
reunión de amigas.
En este espacio todas las mujeres son bienvenidas, sin importar edad, condición social, creencia religiosa o de pensamiento. Las
posibles diferencias entre las mujeres que componen el círculo
enriquecerán nuestro aprendizaje y compartir, pues todo lo que le sucede
a cada una de las mujeres, afecta y nutre al círculo.
El
Círculo, al ser redondo, permite que todas las integrantes nos
percibamos, sintamos y veamos, para expresarnos desde nuestra verdad y
generar empatía y conexión por el grupo.
En el círculo no hay
jerarquía lineal, ni triangular. El círculo nos conecta con modelos de
toma de decisiones ancestrales, dónde la palabra de cada componente es
de igual importancia.
¿Qué se aborda en los Círculos de Mujeres?
El
círculo nos reúne para celebrar la Unidad y el Recuerdo de lo Sagrado
Femenino. Nos brinda la oportunidad de juntas rememorar y acceder a
información de nuestros ancestros a través de lectura de textos, cantos,
música, danza, simbolismo, mitología, recitación, meditación… y
múltiples expresiones del alma para encender el Espíritu.
Un Círculo
de Mujeres es un lugar sagrado de Reunión y Reencuentro femenino. Es
acceder al recuerdo de nuestras abuelas, madres, tías, primas, y
hermanas en busca de nuestra Esencia femenina.
El Círculo nos ayuda a
revivir los antiguos rituales de iniciación y celebración del Cuerpo
Femenino (Ritos de paso: de niña a mujer, de mujer a madre, de madre a
abuela…; Feminidad Cíclica: Menarquía, Menstruación y Menopausia) y la
propia Naturaleza (Estaciones, fases de la Luna, los Elementos…).
Cada Círculo es único, la energía que se moviliza en ellos depende de las mujeres que lo componen y de cuál es su intención o propósito a desarrollar en cada encuentro.
¿Qué nos aporta formar parte de un Círculo de Mujeres?
El
Círculo nos devuelve la capacidad intuitiva esencial, nos conecta con
los ciclos naturales de Vida-Muerte-Vida; nos inspira para crear el
cambio que anhelamos en nuestra vida, y por lo tanto nos regala la
oportunidad de transformar la sociedad en la que vivimos ofreciendo
conciencia y plenitud a nuestras familias, parejas, y generaciones
venideras.
Comprendiendo y recordando nuestra Feminidad, sanamos
nuestros vínculos maternos y nos aceptamos y amamos como las mujeres que
somos. Esto supone un cambio inmenso en nuestras vidas. Accedemos a
nuestro potencial, nos hacemos responsables de nuestra propia
existencia, y por lo tanto, nos damos permiso para abrazar nuestro poder
personal.
¿Qué hace falta para crear un Círculo de Mujeres?
Tan
sólo sentir el llamado a convocar la reunión desde una escucha sincera.
Un anhelo por el reencuentro con otras mujeres para juntas deshacer
nudos y crear lazos de amor y entrega.
Un espacio limpio y cuidado para crear un ambiente cálido, acogedor y nutricio.
Un
altar dónde reconocer nuestra propia divinidad, y sentirnos reflejadas a
lo largo del encuentro. El altar es en realidad el útero primordial, un
cáliz, un lugar que acoge y nutre el trabajo que desarrollamos desde el
círculo. Es el reflejo de la Madre Divina, de la Gran Diosa, de Shakti,
de la Madre Tierra y del Padre Cielo. Es la alquimia. La Gran Boda. La
Comunión y el Éxtasis de Vida.
¿Cómo podemos crear un Altar?
De
igual modo que cada círculo es único, cada altar es especial e
irrepetible. No es preciso crear altares muy laboriosos, esto dependerá
de nuestros gustos personales, y las mujeres que integren el encuentro.
Cada una de ellas llevará una ofrenda para colocar en el altar,
representando así algo de importancia para ella en ese encuentro, y que
al llevárselo de vuelta a casa, le recuerde el trabajo realizado, le
inspire y aporte fortaleza para afrontar su vida cotidiana.
Por ello para mí es importante crear un altar con mimo y dedicación, atendiendo diferentes particularidades:
• Que el altar sea redondo (a modo de yin/ yang; sol y luna; abrazando las dos polaridades masculina y femenina que configuran el Universo creador)
• Tener las cuatro direcciones como referencia:
Norte ( Tierra ) , Sur ( Fuego) , Este ( Aire), Oeste ( Agua ) y
colocar en sus respectivos lugares elementos del altar (Norte: semillas
y/o frutos ; Sur: Vela/ s ; Este: Incienso ; Oeste : Agua )
• Flores frescas
(las blancas son las de más alta vibración, para encuentros más
místicos o meditativos, mientras que las rojas, naranjas o amarillas son
adecuadas para celebraciones más expansivas).
• Una vela principal
(colocada en la dirección del Fuego) que nos conecte con el Fuego del
Espíritu, con la Luz y la Conciencia Infinita, con el poder de
transformación y purificación del fuego.
• Quemar palo santo,
salvia o inciensos naturales: Es un modo de limpiar el espacio, y a
nosotras así como nuestras emociones. El olor que desprenden también nos
ayuda a relajarnos, y conectar con estados más profundos de nuestro
ser.
• Piedras y Cuarzos: Según lo que vayamos a
trabajar utilizaremos un tipo de piedras u otro, pero no nos
equivocaremos si tenemos Cuarzo Rosa, Cuarzo Cristal y Amatista.
• Un libro de referencia: Citas, simbolismo, poesía, mitología, espiritualidad…
Para mí
el altar, es un símbolo muy poderoso. ¿Por qué? Porque tras más de 8
años guiando y facilitando Círculos de Mujeres he percibido cambios y
transformaciones casi instantáneas con el mero hecho de contemplarlos. Las
mujeres se transforman al estar delante del altar. Algo ocurre dentro
de ellas. Desde el asombro, hasta el deleite, desde el desconocimiento
hasta el recuerdo más profundo.
Algo ocurre en nosotras al sentarnos
en círculo alrededor de un altar. Se activan patrones de recuerdo
celular, reconocemos símbolos y nuestro inconsciente genera información
que nos invade de calma, una serena perplejidad de que estamos “en
casa”.
El acto sagrado de sentarnos en silencio y
tan sólo observar, la contemplación del altar, nos insufla energía
renovada, es una recarga de energía cósmica a modo de regalo divino
LALITA DEVI
DANZA Y EXPRESIÓN
Bailarina Holística, integra la Danza como Lenguaje del Alma.
Diplomada en Hatha Yoga, Chakradiagnosis y Reiki Usui y Egipcio.
Dirige
la Formación Integral en Danza Kundalini, Danza Sagrada Ritual,
Movimiento Holístico Femenino y Círculo Integral de Mujeres. Imparte
clases regulares de Danza Mística, talleres de Ady Yoga, y encuentros de
Giro Místico.
Organiza espectáculos de Danza, Música y Poesía para el Despertar.
Es directora artística de SarasvatiDanza, fundadora de Sarasvati Espacio Holístico en Madrid, y de la Asociación Lalita Devi.
Su nombre en japonés es Kannon, en tibetano Chenrezig y en sánscrito Avalokitesvara.
Es uno de los seres iluminados más importantes, su culto se extiende en China, Tibet y todos los países del Noreste y Sudeste Asiático.
Su origen se remonta a varios siglos. La primera traducción donde figura Kuan Yin corresponde al año 406 de nuestra era. La leyenda dice que no descansará sino hasta liberar a todos los seres humanos del sufrimiento.
La estatuilla que nosotros conocemos de la maestra la describe en forma por demás simbólica ; por lo general se la encuentra de pie reposando en una hoja de loto que simboliza el pensamiento, si la estatuilla esta en otra postura, ya no representa a la Diosa de la Misericordia , sino a la Diosa de la Fecundidad.
En su mano izquierda, sostiene un largo tallo con una flor de loto que reposa sobre su corazón. Esta flor, simboliza a la Chispa Divina o Cristo Interno, que vive en el corazón de cada ser humano.
La mano derecha de la Diosa representa en estatuilla, generalmente es movible, sus devotos utilizan esta cualidad para hacerle una petición, volteando así su brazo móvil, y regresándolo a su lugar cuando esta petición sea cumplida, sin embargo esto simboliza la capacidad de la Madre , de extraer de la sustancia cósmica universal (hacia arriba) cualquier manifestación al mundo físico (hacia abajo). Los lóbulos de las orejas alargados, representa la rendición de la Madre ante la voluntad representada por el Padre.
En la cabeza tiene un moño, que significa el chakra coronario despierto, algunas representaciones cambia este moño por una corona.
La maestra Kwan-Yin es venerada en China, donde tiene su templo, llamado Templo de la Misericordia se localiza etéricamente cerca de Pekín, y está rodeado de 12 pequeños templos, donde habitan todas las legiones de seres que están a su servicio.
En este templo, arde la llama de la misericordia y de la compasión para la tierra y todas sus evoluciones ; ella magnetiza esta llama desde el mismo corazón de Dios, y la proyecta en la atmósfera de la tierra.
KUAN YIN forma parte del Tribunal Kármico, que es el que se encarga de examinar todo lo que hay en el mundo del aspirante a encarnar, evaluarlo, y así destinar esa alma a la esfera donde recibirá instrucción y ayuda entre una reencarnación y otra...
Después que el Alma ha pasado por el cambio llamado “muerte” al final de su vida en la Tierra , nuestra Amada Kwan Yin vuelve a rendir cada uno de los Servicios específicos, ayudando a quitar muchas de las marcas dejadas por las frustraciones, sentimientos de culpabilidad aparentes; remordimientos, y las causas de otras condiciones negativas registradas en el Cuerpo Etérico, quitando tantas como la Ley del Ser lo permita. Esto le hace más fácil al individuo el momento de presentarse ante el Tribunal Kármico; el cual debe examinar todo lo que hay en el mundo del Aspirante y a la vez capacita a este amoroso y misericordioso Tribunal para destinar a esa Alma a la Esfera más alta posible, donde recibirá instrucción y ayuda entre una y las otras encarnaciones.
Hace mucho tiempo, ella vivió en la tierra en el plano físico, y en esa época, la gente iba hacia ella para pedirle misericordia, y ayuda para transmutar el propio karma que es otro de los dones que se la adjudican.
En esa época, vivía ella en un templo, pero viajaba frecuentemente para ayudar a la gente que no podía realizar la peregrinación hacia su templo.
Particularmente, ella se interesaba por los niños, y por sus padres ; en aquellos años Kwan-Yin , bautizaba con fuego violeta a los niños que eran traídos a ella. Los tomaba en sus brazos durante la ceremonia, transmutando así todo el Karma que fuera posible.
Sus devotos, afirman que su templo está rodeado de un lago de luz violeta, el cual tiene la propiedad de disolver karma, malestares, sufrimiento y dolencias de toda persona que pida ser bañada en él.
Gran Invocación a Kwan-Yin
Yo soy la Luz del mundo, soy un ser que ha venido de Luz, vive en la Luz y crea la Luz.
Adonde quiera que voy, yo soy las manos de Dios trabajando en la Tierra, y soy inspirado por la Voluntad Divina.
Soy impulsado por la Fuerza Divina y estoy trabajando en el Plan Divino.
Yo soy un miembro activo de la Hermandad Blanca y estoy apoyado por todos los miembros de la Jerarquía, y estoy trabajando en un proyecto específico de la Jerarquía.
Yo soy parte del nuevo grupo de servidores del mundo, yo soy parte de una cadena de Amor y de buena voluntad que se extiende por todos los rincones del planeta.
Yo soy la punta de lanza para llegada a la tierra de los Maestros de la Jerarquía.
Yo soy una antena cósmica que se abre hasta el infinito para recibir las Bendiciones del Altísimo.
Yo soy un emisor de todas esas energías que estoy recibiendo para multiplicarlas por donde quiera que vaya y hacerlas llegar a los lugares más inusitados.
Yo soy la palabra que sana, las manos que ayudan, los pies que dirigen, la mirada que salva.
Yo soy el microcosmos en acción, soy la red que comunica al hombre con Dios, soy el vinculo de fraternidad en donde se funden todos los seres humanos.
Yo soy la luz del mundo, el aniquilador de la obscuridad y la confusión, el guerrero de la luz, el que alumbra sin dar sombras, la roca firme en donde se apoyan las embarcaciones de la Vida.
Yo soy la sonrisa que alienta, el brazo que consuela, y soy el hijo de Dios en la Tierra.
Lleven esta oración siempre con ustedes, mis bendiciones quedan eternamente en sus vidas.
Que así sea.